www.autosamericanos.com.ar
Quienes somos

Un día de mayo de 1997 me encuentro con un Ford Galaxie 61, yo iba en mi Impala SS 64, luego de tocar la bocina, paramos para charlar. Así fue como conocí a mi amigo Enrique Leichtner. Me invitó a una reunión de autos americanos que tenía lugar el último domingo del mes, y yo lo invité a una de las cuales yo concurría. Luego de ir ese domingo a Mc Papas en la costanera y conocer nuevos adeptos a este hobby no falté a una sola reunión. En Febrero del 98 comenzamos a trabajar juntos y así nació Automóviles Americanos en Argentina. Los primeros encuentros contaban con 10 autos y ahora en una conocida casa de hamburguesas de Avda. del Libertador al 2800 , en Olivos, somos más de 90. Nos reunimos siempre el último domingo de cada mes con el fin de conocer nueva gente, intercambiar información y repuestos. No cobramos cuota alguna y nuestro objetivo es relacionarnos con personas que compartan la misma pasión. La mayoría de nuestros 300 integrantes poseen motores V8. A mediados de cada mes organizamos salidas a la ruta (Luján, Escobar, Chascomús, Cardales, Capilla del Señor, etc.) para disfrutar de nuestros autos y familia.

Para ser parte de este grupo tenés que tener un vehículo fabricado en U.S.A., no importa de que año y en que estado se encuentre, lo importante es tener ganas de pasarla bien entre amigos.

Mi fascinación por estos autos arranca como la de la mayoría de todos ustedes mirando aquellas películas y series que marcaron toda una época cuando éramos chicos. Quien no recuerda los Corvettes de RUTA 66 y EL MAGO, el Mustang de BULLIT, el Dodge Charger de LOS DUKE DE HAZZARD, el Galaxie de LOS INVASORES, el Impala de BARETTA o el Pontiac de ARCHIVO CONFIDENCIAL y BANDIDO.

Haciendo un poco de historia les puedo contar que en U.S.A. después de la Segunda Guerra Mundial se produjo un fuerte desarrollo económico que puso al alcance de la clase media el automóvil pero hasta mediados de los cincuenta cuando Ford y Chevrolet presentan sus V8 de válvulas a la cabeza no pudieron disfrutar de la performance que ya poseían Cadillac, Chrysler y Oldsmobile (marcas de excelencia). Luego del debut del small block de Chevrolet de 265 pulgadas cúbicas de desplazamiento los americanos asistieron a una carrera desenfrenada por la potencia. Elevaban relaciones de compresión cada año, experimentaban con carburaciones múltiples, motores enormes en autos compactos y por supuesto frenos en su mayoría a campana, como ellos decían estos autos fueron concebidos para andar y no para detenerse. Además se incluían avances en el confort tales como aire acondicionado, control de velocidad crucero, buscador de estaciones de radio automático, asientos y vidrios eléctricos, sensores fotoeléctricos y demás excentricidades, todas ellas con muy poca electrónica involucrada. Gran parte de estas ideas las vemos hoy como equipamiento standard. Pero todas las cosas buenas llegan a su fin y en 1972 debido a la crisis del petróleo, los motores comenzaron a ser descomprimidos puesto que la falta de plomo en la nafta, elemento de alto poder antidetonante, obligó a bajar las relaciones de compresión que habían llegado en sus más potentes exponentes a 11,5 a 1.

Pero lo más lindo de todo esto pasa por otro lado, es esa sensación de encontrar el auto que querés desde hace mucho tiempo, la historia que encierran, el preguntarse si alguna vez recorrió ese trayecto que estás transitando en él, la satisfacción de recibir elogios en lugar de envidia y de vez en cuando demostrarle a algún irrespetuoso que en Detroit hace cuarenta años la performance era una prioridad tan importante como el confort. En síntesis, conducimos autos viejos, no obsoletos, que cuando escuchan algún rock and roll rejuvenecen un poco.

Los esperamos el último domingo de cada mes.

Marcelo León
Automóviles Americanos en Argentina
4567-2174
15-4405-9678